Otro miembro del anterior gobierno de la Xunta de Galicia ha esperado los dos años de rigor tras abandonar la política para gestionar un fondo de inversión. Unos ponen sus esfuerzos en el trabajo para ganar calderilla en cambio otros, esto desde la atalaya del poder se debe de ver muy claro, ponen su dinero o el de los demás a trabajar, eso si que da dividendos (por cierto no se porque no le llaman multiplicandos). Pareciese que la política fuese el purgatorio a la espera del nirvana económico. El día que un político vuelva a su profesión original, será noticia de primera plana.
Publicado en La Voz de Galicia, 15 julio de 2011
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