El movimiento feminista está siendo arrollador e imparable.
Las fuerzas retardadoras del progreso, se han puesto en marcha. y atacan.
Ya había padecido ataques el Movimiento feminista de los 70, como lo habían padecido las Sufragistas. El ataque entonces se centraba básicamente en ridiculizarlo y recordar "la supuesta inferioridad" de la mujer, ocultándola con el término "diferente"
Ahora que parece que la cosa va en serio, disparan desde varios ángulos y con distintas armas.
De un lado surgen los ataques de un grupo de hombres cavernícolas que se pueden identificar cuando utilizan el calificativo "feminazis", esos se descalifican solos. Otros ataques son más sutiles incluso desde el falso feminismo y alabando la larga lucha de las mujeres hasta ahora, aducen que ya se consiguió la igualdad y que las mujeres vayan parando, esto a veces dicho incluso y sobre todo por mujeres, pertenecer al colectivo, les da más credibilidad.
Es el caso del artículo aparecido en la Voz de Galicia, firmado por Carmen Blas Orbán titulado Pancarta, en él censura a una niñita, que portaba una pancarta que decía "Igualdad de género" en una manifestación el pasado día 8 de marzo. Primero censura el término género y en cuanto a la "igualdad de derechos" afirma que en este país las leyes ya no ponen obstáculos a ello.
Blas puntualiza "Sucede algunas veces, que aunque las leyes te reconocen tus derechos los hombres pueden ponerte trabas. Y lo intentan, pero tienes las leyes a tu favor y, lo que es más importante, te tienes a ti misma: tu valor, tu constancia, tu interés en alcanzar tus sueños siempre dentro de una óptica de sanos principios, honradamente, sin pretender competir con ellos en tantos problemas que surgen por egoísmos o deseos incalificables".
Para corroborar su relato, se pone a sí misma de ejemplo, de cómo consiguió ser médico, pero su sueño era ser médico asistencial así que gracias a una ley durante el franquismo en el 61, lo consiguió ya que hasta entonces estaba vetado el acceso al Cuerpo Sanitario de la Seguridad Social, Escala de Médicos Inspectores y profesionalmente con el tiempo llegó más "arriba" de lo que había esperado. Dicha ley beneficiaba a las mujeres de la élite. ¿Cuántas mueres eran médicas en 1961?. Lo de conseguir el pasaporte sin el permiso del marido, quedó para más adelante.
Si Francis Fukuyama, afirmaba que había llegado el fin de la lucha entre ideologías, Carmen Blas considera que hemos llegado al fin de la lucha feminista, (a la que a toro pasado no se atreve a descalificar) y si te sientes discriminada, la culpa es tuya, porque la discriminación se subsana a título individual con valor, constancia e interés. En EEUU, ya no hay racismo puesto que un negro ha conseguido llegar a presidente.
Circunscribe la vida a unas oposiciones
Así que a partir de ahora toda discriminación que padezca la niña será por su culpa por su grandísima culpa.
Carmen Blas no es la única, hay una cohorte de mujeres que combaten el 8 M a las que los medios les dan pábulo, para demostrar su bendita equidistancia.
Como está todo escrito, todas esas mujeres que "triunfaron" que dicen que no han encontrado trabas y no se han sentido discriminadas, forman parte de ese colectivo que Simone de Beauvoir denominaba "Mujeres pelota" mujeres que, tras triunfar con grandes dificultades en la sociedad machista, se prestaban a ser utilizadas por esa misma sociedad para reforzar la discriminación; y así, su imagen era rebotada contra las demás mujeres con el siguiente mensaje: ‘¿Veis? Ella ha triunfado porque vale; si vosotras no lo conseguís no es por impedimentos sexistas, sino porque no valéis lo suficiente’.
Todas esas que pretenden frenar el imparable movimiento que lucha por la igualdad de género, son mujeres pelota y no lo saben, porque entre otras cosas, evidentemente no han leído a Simone de Beauvoir.
La noticia
https://www.lavozdegalicia.es/noticia/opinion/2019/03/18/pancarta/0003_201903G18P12993.htm
Esto es, en suma... Toda la que no piense ni apoye estas ideas feministas es una pelota ignorante y no ha leído tanto como la autora de este artículo.. Que lee a Simone de Beauvoir..
ResponderEliminarLas tropa bien encuadrada jamás da un paso más que su fila. No permitamos que mujeres pelota tengan,ni menos expongan, opiniones propias. Esto es enormemente pernicioso para la idea unívoca del colectivo.
Las mujeres pelota pueden exponer sus opiniones, lo que no pueden hacer es ofender al resto diciendo que si ellas llegaron ya que no hay trabas, las que no lo han hecho son unas incompetentes.
ResponderEliminarLo que hay que hacer es leerlo todo, ya tragamos patriarcado por todas partes, desde los libros de texto donde en las viñetas, papá leía el periódico, mamá calcetaba, el nene jugaba con el trencito y la nena con la muñequita. Así que hay que leer algo que contrarreste y analice la realidad en la que estamos inmersos.
Y no solo hay que leer a Beauvoir, si no también a Susan Faloudi, Fatima Mernisi, Agnes Heller etc.
Un saludo feminista.
Pero es que cualquier opinión puede ofender a cualquiera. Es más, cuando alguien da su opinión debe de asumir el riesgo de que esta pueda ser ofensiva para alguien y, si alguien la escucha tiene que asumir la contingencia de ser ofendida.
ResponderEliminarYo puedo escribir aquí y dar mi opinión con entera libertad... ¿Verdad? Y sin embargo.. ¿Qué certeza puedo tener yo de que mi opinión no le resulte ofensiva? Ninguna; aunque nada más lejos de mi intención...
Un saludo..